17 septiembre 2006

Estética de la huida

"estoy tranquilo, pero herido", Fito Páez


Escapar representa una elección más. Desde tiempos remotos la escapada puede tener las vertientes de cobardía, rechazo y deshonra. Por otro lado, también podía trascenderse en valentía, táctica y estrategia. Parece que mucho ha pasado y no se ha recorrido mucho tramo. Para ejemplo un botón. En nuestra cotidianidad los fundamentalismos exhortan a la bipolaridad del pensamiento, la estructura combatida de la lucha del bien y el mal, y por ello, a una deformidad en la linealidad (recordemos esa sola línea trazada por el Principito donde el hombre descubre un sombrero y el niño una serpiente que se comió un elefante). Bien lo lineal representa uniformidad, dentro de sí el entrelazado de los caminos de significación pueden plantear una zona indeterminada y rica de elementos que gocen de heterogeneidad. La linealidad, por otra parte, añadimos, puede mostrarse como elemento conservador. Preguntamos entonces: ¿acaso no es más revolucionario encender la llama interna de las voces dentro de un sólo cuerpo? ¿que las voces hablen al unísono dentro de una masa paralela al mundo, que encontrarnos con engendros que pretenden ser cien "cosas" sin dejar de mostrar su aburrida homogeneidad? ¿o peor aún desdoblen sus gritos sólo para conservarse, en su espíritu, sobre una sola cuerda floja, en arlequines de porcelana?



Por la lozanía de su temperamento simple, llano y seco, aunque abundante en su telaraña interna, yo propondría (aunque es de conocimiento de todos que no hay nada nuevo bajo el sol) la estética de la huida como ejemplo digno y elegido del ser humano. Huir sin remordimientos, pero huir cargado de utopías. Huir sin la huida y con la huida. Huir sin despechos de uno mismo, pero huir serenamente. Nunca quedarse, pero quedarse quieto. Huir y quedarse, regresar y escapar, para luego volver. En una forma giratoria, con la movilidad de Ulises, y el amor de Ulises, y el perro de Ulises, y los cuernos de Ulises, pero mirar a Ítaca como Penelope, con y sin Ulises. Escapar ya no es más una elección, sino un derecho.



(Reflexión libre y sin corregir sobre el Blog "Huir" de Cristina Chaín:
http://huir.blogspot.com)

6 comentarios:

Cristina Chain / Tijeras Turkas dijo...

Reflexión libre acerca de lo próximo y lo extranjero que hay en el texto de Sonia:

Querida Sonia, debo contarle que jamás en mi vida he tomado un avión, jamás he salido de este pais.
Miraba la foto suya de ñuñoa y el color de la tarde me devolvió la imagen que llevo desde siempre, de un paraiso que en mi infancia siempre dormía siesta, haciendo de mis juegos una fotografía de esta historia nuestra.
Un paraiso del que todos huían y rehuían.
El infierno de las tardes de un pais desfragmentado.
En cambio yo y mis compañeros de juegos sosteníamos la luz como única fuga de las enfermedades de nuestras familias.(no pude huir de la lobotomía del alma)
Su reflexión tiene que ver con algo profundamente social : El dolor que venía por las calles como vientos de un pueblo que clamaba y la agresión de las elites, y a la vez con un acto profundamente humano: fugarse de los aparatos enfermos y volver a ellos para construir de nuevo la esperanza.
emocionada y atenta
Cristina

KuruPicho dijo...

Sonia, los franceses Deleuze/Guattari hablan de una fuga pero que duela al sistema, no rendirse ante los hechos, ante lo dado y nos oprime, sino retirse del juego como dejando huellas que prendan una subversión, algo como una bomba, un gesto, un palabra que desestructura lo que dejo. Dejar, abandonar, huir, abandonar el juego reiterativo y nulo d ela cotidianeidad pero haciendolo resquebrajarse, producir apenas una herida en su superfecie impoluta y cegadora. Te voy a mandar , cuando me des tu dire postal, un libro sobre Ulises y la imposibilidad de volver a Itaca...si me lo permites, amiga.El blod de alguna manera funnciona como una huida d ela línea recta, abrimos un laberinto sin Ariadna ( mejor con Ariadna pero sin ovillo para volver alasalida)para perdernos, no reencontrar el rostro envejecido en el reflejo de la realidad.Si viajara no repetiría los deseos introyectados del sistema corriendo a algún país europeo, viajar para mí sería perderme en Africa o Asia, buscar lo otro no lo mismo.Yo soy como Kennedy Toole, Huysmans y otras gentes, anti-viaje fundamentalmente. moverse para repetir no me interesa.saludos, muchos para vos. Muy bello el post.

Loredana Braghetto dijo...

tú has huido alguna vez?

Sonia Marcus Gaia dijo...

Querida Cristina:

Fíjate (empezando un comentario como Kiko el de la Vecindad no es de lo más profesional, pero creo hay confianza) que Fernando Sabater habla precisamente de esta clase de "huida" en la permanencia, que por demás es igual de validera que la escapada que conocemos. Cuando dice que: "Durante mucho tiempo he creído que la principal explicación de por qué la historia está tan llena de atrocidad y barbarie había que buscarla en el aburrimiento" lo que desata es una reflexión sobre cómo la gente empieza a desear salir a conocer lo desconocido o a buscar quilombo inmediatamente se aburre. Por ello, extraña y gloriosa la manera en que la gente se queda en su casa pero entretenida. Me resulta increíblemente reaccionario (¡pero maravilloso!) que diga que la gente que sale a la calle queda en los libros de historia sencillamente por meterse en líos. No tenemos Historia de la cotidianidad, y sin embargo, que fantástico sería que aprendiéramos encerrados como las marmotas (yo misma recurrí muchas veces al encerrramiento para huir). Explica Sabater que el mismo Homero recalcaba que tenía que existir Troya para que los poetas tuvieran algo que decir, o que Tolstoi decía que las familias felices no tienen historia. Las historias personales, las historias humanas y sencillas, por desgracia para la humanidad, sólo caben en las azucareras. Hay una expresión de Nietzche que viene especialmente para esta seudo-respuesta que te doy comparado con la espesura de tus recuerdos de infancia: Comenta Nietzche "Más que ser felices, los humanos quieren estar ocupados. Todo el que les procura ocupación es, por tanto, un "bienhechor". ¡La huida del aburrimiento!(...)"

Bien palabras como éstas pueden caminar como la Maga de Cortázar, en la cuerda floja y sin pantaletas, pero dos libertades burguesas podemos tomarnos: que "nada seca tanto la inteligencia como la repugnancia a concebir ideas oscuras (E.M.Cioran) y que "Y aunque el hombre quiera huir de sí mismo/ como de cárcel que le odia y retiene,/ hay no obstante en el mundo un gran milagro:/ yo siento que toda la vida es vivida./(Rainer María Rilke).

cariños,
Sonia.

Sonia Marcus Gaia dijo...

Cristino:

Ninguna sensación más desagradable (y penosa) puede generar mayores esperanzas que aquella en la que te encuentras con las manos vacías. Nada puede hacerte desesperar (y activarte) más que una sociedad que ha tirado la toalla, usando el lenguaje del boxeo del cual admito, bárbaramente, soy fanática. En las líneas de fuga de las que hablas, surge entonces una forma de desterritorialización que, por lo menos a mí, me permite crear un espacio propio y utópico que por lo menos haga explotar algo, aunque sea en mi cabeza. Ese huir descabellado hacia el centro, pero ejerciendo la huida con mapas nuevos y con líneas que no parten a ningún lado. Digamos ese medio de la cuerda donde no hay principio ni final. ¿Se puede volver a creer? ¿Se puede dejar de creer? ¿Se cree sin creer? ¿No se cree creyendo? Creo que hay que empezar por la circulación de ideas dentro de estos espacios de fuga, las únicas utopías se encuentran en el mundo al revés, que no es sino un reflejo de lo real, pero al otro lado del espejo. Posiblemente “somos” ese otro lado del espejo. Quizá incluso seamos la parte que no vemos. Quizás no seamos nada. Practicar el nomadismo, físico o mental, también genera la oportunidad de perderse, aunque sea en uno mismo.

El Blog permite transitar por estos laberintos de monos de los cuales te hablo. Digo, habrá a veces que llevar casaca y fusil por si te encuentras con Belerofontes y Quimeras, pero en la actualidad, como no todos los caminos conducen a Roma, habrá que esperar a que, como dice Virulo (el magnífico comediante-cantante cubano, de allí que sus palabras, desde el humor satírico comunista, sean doblemente maravillosas) sintamos esto como: “una ciudad sin casa ni balcones, sin dirección, ni nombre ni país, en donde al despertar, se comience a soñar y de cabeza se viva más feliz.”. Incluyo este comentario que encontré en un blog para no seguir con esta telaraña catatónica de expresiones con las cuales ya debes sentirte amenazado:

“En la sesión de preguntas de la conferencia de hoy alguien del público me preguntó si consideraba que el blog era parte de la fuga de cerebros. La idea me pareció extraña, he respondido muchas preguntas raras, ininteligibles, impertinentes, y pensé que sería otra de esas preguntas y dejé que hablara y siguió hablando y explicó que entendía fuga de cerebros como la experiencia de no encontrar que el lugar real en el que nos desenvolvemos nos permite explorar a fondo quiénes somos y cómo desarrollarnos y entonces, sin lugar a dudas, una página electrónica en donde alguien se conoce o se reinventa, es un exilio, es una fuga de cerebros, un nuevo sitio, y le dije, sí, no lo había pensado, tu idea me gusta.”
http://hyepez.blogspot.com/2006_07_01_hyepez_archive.html

Saludos,
Sonia

Sonia Marcus Gaia dijo...

Loredana:

Uy, hay preguntas que no se hacen a un puertorriqueño. ¡Si somos por automasia escapistas! Nuestra metáfora más mordaz es precisamente huir: a los niuyores, a disney, a las cataratas del niágara, a la florida, a la república dominicana en los ferrys; de la política, de las utopías, de los deberes ciudadanos, de las huelgas, del camino a casa, de nosotros mismos ... mecánica cuántica del desvío, con un letrerito que diga: "Cerrado por derribo" como los versos de Sabina.

No tan sólo he huido, niña, he realizado un pecado capital, ¡he vuelto!

Saludos,
Sonia